La realidad puede superar a la ficción. Esta es una frase que solemos oír con bastante frecuencia en boca de la gente, pero…. ¿Eso es verdad? Puedo decir sin dudarlo que en los juegos de rol la realidad no se acerca ni por asomo a dicha ficción. Siempre llega a ocurrir algo totalmente surrealista que en la vida podría llegar a ocurrir.
La primera de las cosas que destaca en un juego de rol es la cantidad de objetos que podemos llevar encima, y es que si nos metemos en el inventario, podemos decir que ni un tren de carga podría llevar tal cantidad de cosas. Pociones, objetos sagrados, accesorios, hierbas curativas, armaduras, botas, guantes, pistolas, espadas, varas, palos, vestidos, diademas, magias, munición, anillos, amuletos, pendientes, aparatos electrónicos, documentos escritos… ¿Quién decía que la mochila escolar de los niños llevaba demasiado peso?
Y claro ¿Los causantes de llevar tal cantidad de trastos encima de quienes son? Pues ni mas ni menos que los vendedores. Y mientras tu te matas a vencer al enemigo final de turno para poder avanzar, el hombre ya esta mucho mas delante que nosotros. Además, si es conocedor de la mala situación del planeta ¿¡¿PORQUE TIENE CADA VEZ PRECIOS MAS DESORBITADOS?!? Aunque realmente debe de ser porque si es capaz de avanzar antes que tu, también debería ser capaz de rematar al enemigo de turno en caso de que el mal acabase con nosotros.
Cualquiera mete toda la equipacion aqui dentro. Podrias meter la canoa para cruzar los rios...¡Ay no! ¡Se ve que no entra!
Normalmente los héroes acaban rodeados de compañeros de equipo, aunque de la familia ni rastro. O son huérfanos o sus padres no son ni mencionados en toda la trama ¿Tan poco añoran a su familia? La verdad es que son ciertamente insensibles.
Lo que siempre me he preguntado ¿Por qué en estos juegos, los personajes pueden morir para siempre y en batalla cuando mueren, los puedes revivir con una pluma de fénix? La verdad es que sin esta incoherencia resultaría mucho más fácil resucitar a Aeris…sniff.
Y la gota que colma el vaso es el enemigo final. Conoce a la persona que le esta desbaratando los planes y en vez de encargase el desde el principio de dar una paliza al héroe, se dedica a entrenarlo para salir vencido de la batalla final. A veces los trabajos es mejor que los haga uno mismo…
También hay veces que es mejor dejarles cocinar a otros. Es que cuando se tiene un día malo en la cocina, luego la gente no se olvida de la tontería de que pasaste un poquito de mas la carne.
En definitiva, hay circunstancias que en la realidad pueden ser totalmente increíbles, pero no se puede negar que en los videojuegos hay cosas insuperables que no podremos emular hasta dentro de….bueno, casi mejor no me aventuro a decir nada, no vaya a ser que me contraten como analista de videojuegos por tener la misma efectividad que Michael Patcher.
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